La orientación laboral es una de las herramientas que la Organización Internacional del Trabajo señaló como indispensable para la gestión óptima de recursos humanos y empleo.

Es un campo de estudio que tiene en cuenta los factores (culturales, sociales, económicos, etc.) que atraviesan a una persona a la hora de definir a qué se quiere dedicar. Teniendo en cuenta lo anterior puede definirse desde la crianza, desde la primaria, pero también personas mucho más adultas.

Está dirigido a personas que quieren cambiar su rumbo laboral, que buscan reinsertarse, pensar un proyecto de retiro, que no saben si quieren estudiar o no o qué. No es exclusivo de los jóvenes que terminan la secundaria, como se suele generalizar.

Apunta a prevenir decisiones tomadas de manera apresurada o influenciadas por el entorno. Además de guiarnos como mentor, nos brinda herramientas para diseñar un currículum ideal para una empresa o puesto en específico. Nos ayuda a comprender qué necesitamos para cumplir con determinadas tareas en cuanto a formación o experiencia. Encauza nuestras competencias y presenta propuestas para adquirir más en caso de que sea necesario.

Para ser orientador es recomendable disponer de algunas de estas titulaciones: Relaciones Laborales, Trabajo Social, Psicología, Sociología, Derecho o Pedagogía, formación complementaria en orientación laboral.

Suele pedirse experiencia en docencia o formación aunque no es obligatorio. 

La tarea de un orientador laboral radica en encauzar a una persona o un colectivo que quiere iniciar un nuevo proyecto laboral. Puede tratarse de un estudiante egresado de la secundaria, un estudiante de universidad que ya no le gusta su carrera, un empleado que quiere cambiar su rumbo laboral o incluso un retirado que quiere iniciar un nuevo proyecto de trabajo.

El orientador sabe identificar las habilidades de un grupo de personas o de un solo sujeto para potenciarlas, pero también propone formación para aquellas cualidades que sería útil adquirir.

Suele trabajar en el ámbito público. Sin embargo, cada vez se lo solicita más en empresas privadas y universidades.

Se mantiene en contacto con las empresas y los perfiles profesionales para conectarlos según las necesidades y objetivos de cada uno. También asesoran y acompañan a quienes buscan mejorar su empleabilidad.

Por otro lado, elaboran planes para grupos de personas con dificultades en la inserción laboral. Mantienen actualizados a los aspirantes a un puesto. Hacen un seguimiento de las contrataciones en las que han participado.

Hay una serie de pautas con las que el orientador debe cumplir:

• Planificación: se tienen en cuenta los objetivos que el sujeto pretende alcanzar.
• Información: hay que estar actualizado sobre las búsquedas de perfiles, qué competencias son más requeridas. Es importante observar de manera recurrente los portales de búsqueda de empleo.
• Habilidades: es importante saber identificarlas, potenciarlas y expresarlas

Para aprender en profundidad orientación laboral es necesario formarse adecuadamente.El curso de orientación laboral Online 100% de Academyformacion está dirigido a todas aquellas personas interesadas en orientación laboral y que deseen disponer de la titulación.

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